Mientras Raúl Durdos celebra con champang la aprobación, sin lectura, de los balances del SOMU y se apresta a que la junta electoral solo oficialice su lista para las elecciones de diciembre, la situación de miles de marineros es por demás preocupante.

Mauro Díaz, marinero de Rawson, paciente oncológico, está literalmente “en la calle” junto a su esposa y sus dos pequeños hijos. Su historia se hizo conocida a comienzos de año cuando batalló contra una dura enfermedad en absoluta soledad, sin ayuda del gremio al que aportó durante años, y solo con el apoyo de otros marineros y la comunidad que le brindaron ayuda.

Transitó una operación y su estado de salud sigue siendo delicado, pero su situación empeoró, volvió a Rawson, durante meses alquiló un lugar donde no pudo pagar porque no ha podido volver a trabajar, y se quedó en la calle.

Victoria Ybarra, esposa de Díaz explicó que “nuestra situación empeoró, estamos en situación de calle, en donde estábamos debemos mucho dinero, no pudimos pagar el alquiler, y ya no nos puede aguantar más el dueño, y tiene razón”.

Mencionó que hicieron gestiones para recibir asistencia ante la Municipalidad de Rawson. “Iniciamos un trámite en Desarrolló Social, hace más de tres meses, y me tienen a la vuelta el director Juan Pablo Tracomilla. Me sigue pidiendo papeles que ya entregué y hace 15 días una de las secretarias me dijo que estaba en contabilidad y hoy nos enteramos que nunca fue así”, lamentó sobre las trabas burocráticas en el municipio capitalino.

“Vamos a llevar de nuevo una declaración jurada de ingresos. Me cambiaron la caratula tres veces y no avanza, traté de no llegar a esta situación, pero ya me pidieron que desaloje el lugar. No tengo como mantenernos, ni un lugar dónde vivir. Sacamos préstamos para mantenernos y estamos cada vez más endeudados. Estamos desesperados”, dijo con tristeza, angustia y dolor al relatar la delicada circunstancia que les toca vivir.

Sin ayuda del sindicato SOMU, al que Mauro Díaz aportó durante años como marinero, ni ayuda de Estado, hoy la familia transita momentos muy difíciles. “Mauro tiene que ser internado porque le van a ser una cistoscopía para ver la vejiga porque sigue con dolor y también tienen que ver el riñón que tiene un pequeño bulto”, describió sobre la frágil salud de su esposo.

“Hace cuatro meses volvimos a Rawson después de la operación. El tratamiento y su recuperación fue en el hospital público Rossi de La Plata. El sindicato (SOMU) no aparece, solo estuvieron para la operación, después nos dejaron tirados. Ni se preocuparon por su afiliado. Sí la familia marítima que siempre nos ha acompañado y dado su apoyo”, contó Victoria sobre la falta de acompañamiento por parte de la organización sindical que debiera representar a los marineros.

“El hombre que nos alquilaba no nos puede aguantar más y lo entendemos. Tenemos que desalojar. La ayuda del Municipio no llegó porque con eso íbamos a pagar la deuda del alquiler, pero nos tienen a las vueltas”, relató.

Ybarra instó a ser escuchada por las autoridades, la familia marítima y la comunidad en general, su prioridad hoy es conseguir un lugar donde vivir junto a sus pequeños hijos y su marido marinero que sigue convaleciente y con tratamiento oncológico. Su situación es desesperante y piden ayuda. Para comunicarse con Mauro Díaz y Victoria Ybarra pueden haberlo al celular: 2804580629.

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