La crisis que atraviesa la pesca de Chubut sigue agravándose y hay sectores que agitan la idea de terminar anticipadamente la temporada para que ‘truene el escarmiento’.
CAPIP pidió a la Secretaría de Trabajo “aleccionadoras sanaciones” contra el Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación, luego que su titular incitara a sus delegados a dejar ingresar la materia prima a las plantas para posteriormente pararlas y dejar que la mercadería se pudra.
La premisa del Gobierno de no perder días de la temporada de langostino, y que las partes negocien con barcos pescando y plantas procesando, no fue escuchada. Luego que se ventilara el discurso de Luis Núñez arengando a los trabajadores, la Secretaría de Pesca “recomendó”, no en forma imperativa, que los barcos dejen de pescar y retornen a puerto.
El paro no está declarado formalmente, pero la retención de servicios continúa en las plantas y se da a pesar de haber una conciliación obligatoria dictada. También es cierto que el actual titular de Trabajo, Nicolás Zárate, (que depende del Ministro de Gobierno, Andrés Meiszner) cuando estuvo a cargo de la delegación Puerto Madryn del organismo laboral, fue casi una ‘escribanía’ del STIA; siempre actuó en consonancia son las demandas gremiales.
Cada día que pasa más toneladas de materia prima (alimento) es tirado literalmente a la basura en diferentes plantas de procesamiento de Rawson y Puerto Madryn; en el anterior episodio de pérdidas de pescado en los barcos en diciembre hubo fuertes condenas públicas desde el Estado, aunque ahora, la Secretaría de Trabajo no ha aplicado sanciones ni intimaciones al gremio de la alimentación. Tampoco, hasta ahora, el Fiscal de Estado ha impulsado alguna acción por ‘ecocidio’ sobre la organización que comanda desde hace casi treinta años el líder cegetista.
Asimismo, cabe señalar que más allá del escenario de conflictividad con los sindicatos, hay factores de mercado, de retracción de la demanda por caída de consumo y precios internacionales deprimidos, con empresas estoqueadas a las que no les disgustaría en absoluto que la temporada no se retome y se cierre ahora. Está claro que no todas tienen las mismas espaldas financieras y económicas.
Mientras hoy se continúan tirando toneladas de pescado por el paro encubierto del STIA, el panorama de corto plazo se presenta adverso. El SOMU de Rawson se reúne en asamblea este miércoles 7 de febrero a las 10 horas para definir cuáles serán las demandas de actualización salarial que plantearán en las próximas horas a la flota amarilla. También Capitanes y Patrones sacaron turno para que les reabran las paritarias.
El año pasado, la temporada de pesquería de langostino en aguas de Chubut terminó el 31 de marzo, mientras que esta zafra lleva dos meses y su continuidad está en peligro.
