En la Oficial Judicial de Rawson de Rawson se llevó a cabo, este jueves por la mañana, una audiencia de apertura de investigación en una de las polémicas derivaciones que ha tenido la causa en que un grupo de empresarios de la estiba de Rawson denunciaron a la cúpula del SUPA Chubut.
La audiencia es por el caso de los empresarios de la estiba Aravales, padre e hijo, que a instancias del Ministerio Público Fiscal aparecieron como denunciantes contra integrantes de la comisión directiva del gremio de la estiba.
Oscar Aravales y Maximiliano Aravales negaron haber concurrido a la Fiscalía de Rawson a formular denuncias por presunta extorsión, sino que fueron a instancias de haber sido convocados, en forma reiterada, a una entrevista, por separado, a pedido de la Fiscal General, Florencia Gómez.
La jueza penal Karina Breckle rechazó el pedido de la fiscalía para la apertura de investigación por las manifestaciones de Maximiliano Aravales, mientras que abrió un periodo de investigación para el expediente basado en los dichos de Oscar Aravales, en cuyo plazo el Ministerio Público Fiscal deberá aportar nuevos elementos para requerir una eventual elevación a juicio.
Cabe recordar que el abogado patrocinante de los empresarios Aravales había denunciado una oscura trama judicial en causa contra el SUPA, en la que señalaba que la fiscal General de Rawson, Florencia Gómez, había direccionado las declaraciones de padre e hijo, y que incluso le informó vía telefónica a Raúl Matías ‘Tato’ Cereseto que el prestador del servicio de estiba había ido a declarar a la fiscalía.
Esas manifestaciones realizadas no fueron grabadas en audio ni filmadas, por lo cual, no hay constancia más allá de lo que quedó asentado en el acta.
Ante la desmentida hecha por los empresarios respecto a que no habían formulado denuncia alguna, la jueza interviniente le preguntó a la fiscal si iba a promover alguna acción contra ellos porque la estaban contradiciendo, al punto que señalaban que la representante del Ministerio Público Fiscal había tergiversado las manifestaciones de los declarantes; aunque Florencia Gómez habría optado por no hacer ninguna contradenuncia.

A todo esto, la magistrada habría hecho una severa advertencia a la Fiscal General de Rawson, reprochándole el accionar en cuanto a la toma de la declaración de presuntos denunciantes que desmienten haber formulado tales acusaciones; incluso porque uno de los declarantes señaló que en determinado momento la fiscal se fue de la entrevista y dejó a un funcionario de la fiscalía que prosiga con el acto. La jueza le llamó la atención a la fiscal por considerar que un accionar de ese tipo podría representar una falta grave en el ejercicio de su función.
Es decir, se hizo una entrevista con testigos y en medio del acto la fiscal se retira, deja a un funcionario que prosiga con la misma, y posteriormente la fiscal firma que ese acto constituyó una denuncia a partir de lo cual requirió una apertura de investigación e imputación de los sindicalistas. Luego, los “testigos/denunciantes” la desmienten y ella desiste de contradecirlos.
El dato sobresaliente de la audiencia de la víspera es que la jueza penal reprochó la forma en que la representante de la procuración fiscal se manejó; desestimó una de las ‘denuncias’ y la otra donde se abre una etapa de investigación la fiscalía deberá aportar nuevos elementos a pesar que el presunto denunciante niega haber hecho acusación alguna.
Llamativamente, el Ministerio Público Fiscal no emitió comunicación oficial sobre la audiencia de este jueves, ya que no hubieran podido obviar el severo reproche recibido por parte de la magistrada.
