Expertos firman en Vigo el I Decálogo científico sobre los beneficios del consumo de pescado a lo largo de la vida humana. Consumir pescado, beneficios saludables para toda la vida: Desde la gestación hasta la geriatría.
Los beneficios del consumir tres o cuatro raciones de pescado a la semana para la salud son incuestionables. Pero si el consumo comienza antes y durante de la gestación, estos serán para toda la vida. Así ha quedado reflejado en el primer Decálogo científico sobre los beneficios del consumo de pescado a lo largo de la vida humana, elaborado a partir de la evidencia científica disponible.
Este Decálogo se ha presentado en el I Simposio “Pescado, salud y sostenibilidad” celebrado en Vigo, organizado por la interprofesional pesquera española Interfish, y que ha contado con la participación de seis especialistas en salud y sostenibilidad.
PRIMER CONSENSO MULTIDISCIPLINAR
El documento, titulado “Posicionamiento sobre el papel del pescado en la salud y la sostenibilidad”, está firmado por Ángel Gil Hernández, catedrático de Bioquímica y Biología Molecular en la Universidad de Granada y presidente de la Fundación Iberoamericana de Nutrición (FINUT); Elvira Larqué, catedrática de Fisiología en la Universidad de Murcia, especializada en el estudio de los lípidos y ácidos grasos durante el embarazo y su impacto en el desarrollo fetal y neonatal; Rosaura Leis, profesora titular de Pediatría en la Universidad de Santiago de Compostela y coordinadora del Grupo GALINUT (Grupo de Nutrición Pediátrica de Galicia); Guillermo Aldama, cardiólogo del Hospital Universitario de A Coruña (CHUAC) y miembro activo de sociedades científicas nacionales e internacionales; Federico Cuesta, director médico del Hospital San Juan de Dios de León y especialista en Geriatría; y Gumersindo Feijoo, catedrático de Ingeniería Química en la Universidad de Santiago de Compostela y referente en sostenibilidad ambiental y economía circular.

Este Decálogo constituye el primer consenso multidisciplinar que analiza, de forma integrada, la relación entre alimentación, salud pública y sostenibilidad ambiental, con el pescado como eje común.
DIEZ CERTEZAS CIENTÍFICAS
Durante la presentación, los expertos explicaron que el decálogo reúne diez certezas científicas, sustentadas en la evidencia internacional, que condensan los beneficios del consumo de pescado a lo largo de toda la vida, desde el embarazo –e incluso previo a la gestación– hasta la vejez. En él se destacan los beneficios del pescado por ser fuente de proteínas de alta calidad, vitaminas, minerales y ácidos grasos omega-3; por mejorar el desarrollo neurológico del feto y del lactante gracias al DHA; por prevenir enfermedades crónicas –cardiovasculares, oncológicas y neurológicas– cuando forma parte de un patrón alimentario saludable; por favorecer un envejecimiento activo y saludable, contribuyendo a mantener masa muscular, función cognitiva y menor fragilidad; y por ser un alimento sostenible, cuando procede de flotas y acuicultura que cumplen criterios ambientales y sociales internacionales.
COMPOSICIÓN NUTRICIONAL
Este Decálogo se sustenta en un documento global elaborado por los expertos en el que se han recogido aspectos que abarcan la composición nutricional del pescado; el papel del pescado en la lactancia y gestación; el pescado en la edad pediátrica, –“hablamos de 8000 días de vida como ventana de oportunidad que abarca hasta adolescencia y parte del adulto joven”–; el consumo de pescado y el riesgo cardiovascular; las enfermedades degenerativas del adulto; y el papel del pescado en la sostenibilidad y medioambiente. “No es posible hablar de salud en el humano sino hablamos de salud en el medio”, destaca Gumersindo Feijoo, catedrático de Ingeniería Química en la Universidad de Santiago de Compostela y referente en sostenibilidad ambiental y economía circular.
En el encuentro se han debatido también los riesgos potenciales del consumo de pescado, aludiendo al contenido de metilmercurio y se ha rebatido este mito ya que la existencia de evidencia científica reciente constata que los beneficios de consumir pescado superan ampliamente los riesgos potenciales, ya que el selenio del pescado actúa como factor protector. En esta línea, los participantes reivindicaron la necesidad de actualizar las recomendaciones de consumo en grupos vulnerables (embarazadas, lactantes e infancia), a la luz de la evidencia más reciente.
CAMBIO DE PATRONES DE CONSUMO
Paradójicamente, hoy en día, cuanto más demostradas están las virtudes del consumo de pescado en la salud, se está produciendo un “alarmante cambio en los patrones de consumo y en la adherencia a dietas saludables y sostenibles, como la dieta atlántica y la mediterránea”, destaca Rosaura Leis, profesora titular de Pediatría en la Universidad de Santiago de Compostela y coordinadora del Grupo GALINUT (Grupo de Nutrición Pediátrica de Galicia). Esto ha provocado una caída en el consumo de productos pesqueros “sobre todo en la población más joven”, matiza, Juana María Parada, directora gerente de Orpagu, situando el consumo per cápita de productos pesqueros en 18 kilogramos/año. “Nos preocupa no solo como sector pesquero, sino también como un problema de salud y por ello queremos potenciarlo con una base científica”, añade.
En este sentido, Ángel Gil Hernández, catedrático de Bioquímica y Biología Molecular en la Universidad de Granada y presidente de la Fundación Iberoamericana de Nutrición (FINUT), recuerda que las actuales recomendaciones internacionales se basan en la evidencia científica disponible antes de 2010, cuando comienzan a surgir los estudios que estudian la relación molar entre el selenio y el mercurio en el pescado. “Hay que revisar las recomendaciones para las poblaciones y esta es una llamada de atención para que las propias instituciones nacionales e internacionales, para que tengan en cuenta la nueva evidencia que se ha construido”, destaca.
“A LO LARGO DE LA VIDA”
En esta misma línea se pronuncia Guillermo Aldama, cardiólogo del Hospital Universitario de A Coruña (CHUAC), que explica que “cuando una agencia hace una recomendación se basa en el principio de precaución y en la mejor evidencia científica del momento. Muchos epidemiólogos han visto que esas recomendaciones no se reflejan en la realidad” por lo que es necesaria la revisión ya que, añade. Elvira Larqué, catedrática de Fisiología en la Universidad de Murcia, especializada en el estudio de los lípidos y ácidos grasos durante el embarazo y su impacto en el desarrollo fetal y neonatal, las recomendaciones actuales han desanimado al consumo de pescado durante la gestación privando al feto de los beneficios de la ingesta de pescado, beneficios que, por otro lado, perduran a lo largo de la vida.
De hecho, los expertos han coincido que en la actualidad España es uno de los países con mayor índice de longevidad, pero dejará de serlo si la generación más joven no regresa a las dietas mediterránea y atlántica, y en especial al consumo de pescado.
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